Ubicado en el madrileño Mercado de Chamberí se encuentra el puesto de Insurgente, un restaurante que no te puedes perder. Su cocina está abierta para todos aquellos comensales que lo que buscan es una experiencia culinaria única, diversa y original.

Lo bueno de estar dentro del mercado es que el ambiente es muy agradable, con una atmósfera cercana puesto que desde la mesa podrás ver la cocina y todo lo que preparan. Y es que sus elaboraciones destacan por ser caseras, utilizando ingredientes de calidad y de proximidad; muchas veces incluso de otros puestos del propio mercado.

La carta de Insurgente resulta de la combinación de algunos platos muy castizos con los sabores de Latinoamérica. Todo ello infusionado por la cultura del Mercado de Chamberí. En poco tiempo Genaro Celia y Agustín Mikielievich, dueños de este pequeño local, ha conseguido posicionar a Insurgente como un destino gastronómico en la capital.

Con una propuesta muy original y, sobre todo, muy bien ejecutada, consiguen ganarse el paladar de muchos clientes que vienen a sorprenderse y disfrutar de la gastronomía más auténtica. Sin adornos excesivos y sin ningún tipo de pretensión más allá de ofrecer buenos platos con mucho sabor.

Una carta sencilla, exquisita y valorando el producto

La carta de Insurgente es breve, de una sola página, pero con las elaboraciones justas y necesarias para que todo el mundo pueda disfrutar de ellas. Destacan platos como sus empanadas de birria mexicana (con la masa casera), queso san simón con chimi de tamarillo y albahaca.

Otra de las masas que elaboran a la perfección es la del pan bao relleno de brisket de vaca a baja temperatura, salsa de chiles fermentados y polvo de chiles. Otro plato que no puede faltar es el tiradito de pescado curado, labneh picante, gel de lulo y zumaq que puede ir muy bien acompañado de ricos pataconcitos.

En su mezcla de sabores y gastronomías encontramos también el fideo udon en salsa de chorizo ibérico con puntillitas crujientes, polvo de chorizo y lima crujiente. O incluso el taco de pollo crujiente tandoori, glaseado de mango spicy y ensalada fresca de cebolla y cilantro.

Para terminar, dos opciones dependiendo de si eres más o menos golosos. Uno un pcoo más dulce es la chocotorta de dulce de leche con crema de avellanas. Pero si prefieres algo un poco más ligero y más diferente tu opción es el original bizcocho de choco blanco, compota de fruta de temporada (manzana), diplomática de especias y merenguitos secos.

En Insurgente apuestan además por una buena selección de vinos que van cambiando para seguir descubriendo una carta líquida que se ajuste a la perfección a su filosofía y su carta. Sin duda, este puesto es un sitio ideal para disfrutar alrededor de la mesa.