Hōō es el nombre de un nuevo proyecto musical, que se lleva gestando a fuego lento durante varios años. Porque hay que meditar bien los pasos a tomar, pero creyendo firmemente en las composiciones de un disco de debut. Su nuevo y primer álbum ya está listo para su lanzamiento: bajo el título de ‘Endeavour’. Y verá la luz en septiembre. Un inicio de etapa musical, en este caso para la responsable del proyecto, la barcelonesa Laia Colás.

Cuando un ‘Hōō’ (pronunciado ‘Houou’) vuela, se dice que el viento se detiene, el polvo se asienta y las aves e insectos se callan. Debido a su pureza, solo aparecen en tierras bendecidas con paz, prosperidad y felicidad. En tiempos problemáticos, siempre huye hacia el cielo. La aparición de un Hōō es un presagio extremadamente bueno. Significa el comienzo de una nueva era.

Sobre ‘Shades’, el segundo single de adelanto del álbum ‘Endeavour’, la propia Laia aparece “jugando con la imagen y la luz. El single gira entorno a la lucha sobre la oscuridad y la luz que hay en nuestras vidas. Cómo existen estados de ánimos y personalidad increíbles dentro de nosotros, que afloran en unos momentos u otros de nuestra existencia. Describe la batalla de la luz y la oscuridad. El videoclip muestra sombras en movimiento, luces que cambian las apariencias y las imágenes, superposiciones e incluso psicodelia.”

Sobre Laia Colás

Laia Colás es actriz, locutora, guionista de corazón y productora creativa. De formación interdisciplinar desde hace años, confiesa que la música le dio un medio de expresión más libre que la interpretación. “Nadie me tiene que dar permiso para poder cantar o componer. Es por eso que para mí la música es simplemente un vehículo para expresarme y un arte donde solo espero que se escuchen las canciones para completar la obra. Y que cada uno interprete la historia que estas le transmitan. No tengo más expectativas“, dice.

Aunque, a juzgar por la calidad de sus composiciones (de creación propia, al igual que la producción y grabación del álbum y del videoclip) no parece que la cosa se vaya a quedar en simples expectativas.