El auditorio de Starlite vibró anoche con la actuación de Luis Fonsi en la cantera, donde agotó todas las entradas a la venta. El puertorriqueño derrochó simpatía y ganas de meterse a su público en el bolsillo, y lo logró, tan pronto salió al escenario.

“Estoy en un sueño y feliz de estar aquí esta noche. Vamos a hacer lo que ustedes digan”, dijo a su público: “Esto es nuestra casa, nuestra familia”, añadió acerca de su actuación en Starlite.

El puertorriqueño, fiel a su estilo habitual, repasó temas de corte romántico como Quien te dijo eso, Llueve por dentro, Se supone o Gritar, para incluso dedicarle una canción a su hija Micaela, Llegaste tú.

“Detrás de cada canción hay una historia, y éstas van cambiando con el paso del tiempo, o no. Hay historias que llegan a tu vida y hay que aprovecharlas”, explicó Luis Fonsi a su entregado público que abarrotó Starlite, al que hizo vibrar con temas bailables como Por una mujer, Échame la culpa o Yo te propongo.

Y por fin, hacia la mediación del espectáculo, llegó el momento tan anhelado por el auditorio con la interpretación de Despacito, y con ella el delirio del público que no cesó de cantar y bailar, un tema que ya acumula más de 500 millones de reproducciones y ocupa el primer puesto en Spotify en 17 países.

Pero el puertorriqueño, con sus 18 años de carrera a sus espaldas y siete álbum de estudios, supo como enganchar al público de Starlite. Así cantó al desamor con Quisiera poder olvidarme de ti y a las mil razones para no olvidarte del tema Mil promesas, entre otras. Y buscó una señal del destino con No me doy por vencido y abrió su corazón con Aquí estoy yo.

Luis Fonsi no se cansó, ni rindió ni dio por vencido y puso el broche final a la noche con el público en pie coreando de nuevo su Despacito.