La televisión tiene un problema serio siempre que realizan ficciones de adolescentes. La mayoría caen en la ridiculización del género y van a lo fácil. Saben que es un público en el que funciona un tipo de contenido y no innovan. Sin embargo, en pleno apogeo en Antena 3 no se lo pensaron dos veces y presentaron una serie que reventó todos los audímetros, generando un fenómeno fan pocas veces visto. En la cadena de San Sebastián de los Reyes se arriesgaron con ‘El Internado’ y no se equivocaron. Eran la referencia al romper todos los moldes existentes y creando un nuevo modelo de ficción.

‘El Internado’ se alejaba de la típica serie adolescente aunque seguía con algunas de sus características. Las relaciones entre los personajes eran inicialmente el eje central, aunque con el paso del tiempo introdujeron el elemento del misterio. Éste estaba presente en cada capitulo y no trataban a los adolescentes como lerdos, era una relación directa, trataban las problemáticas más habituales sin titubeos y es en ese punto en el que reside parte de su éxito.

El elemento en discordia era el misterio. En cada capitulo estaba presente y no lo hacían con tonterías, lo hacían aportando elementos fundamentales en la trama general. Nada sobraba y todo era necesario. La intriga estaba siempre presente y lo hacían con los pasadizos de ‘La Laguna Negra’. Lo que sucedían allí eran trascendental en la vida del internado.

Un misterio muy real

En la serie de televisión aportaron un valor diferencial muy significativo. No tuvieron ningún tipo de titubeo ni miedo a la hora de redactar los guiones con la presencia del nacismo. Lo hicieron de una manera en la que los hechos reales se compaginaban a la perfección con la ficción. El expolio nazi estaba presente en todo momento y explicaban quién era quien y su historia.

Uno de los puntos más significativos se encuentra en la manera de relacionar la experimentación con niños y el nacismo. Ese aspecto está presente en toda la serie, es más, le dedica principalmente todo el final de la misma a ello. El relato de la supervivencia humana en su máximo esplendor. En ‘El Internado’ ya avisaban de ello desde el inicio con la frase “Primero fue la luz y luego los crímenes”. Unos crímenes que en realidad eran de laboratorio y de experimentación en búsqueda de una solución a un virus creado por ellos mismos en el que la supervivencia del más fuerte estaba siempre en primer plano.

Todos los actores tenían un misterio y algo que ocultar. Nadie estaba libre de pecado y de una manera u otra, nos mantenían enganchados con una trama que no era ambigua. En ese sentido nos encontrábamos con historias de niños robados y secuestros, en los que la violencia estaba en primer plano.

Un listón muy alto

Son diversos los motivos por los cuales ‘El Internado’ se ha convertido en una de las series de referencia donde las haya, ya sea por la producción, los efectos especiales o bien por la trama en sí. La serie contaba con un elenco muy peculiar y que ha permitido que actores como Ana de Armas, Blanca Suarez, Ion González o Martino Rivas entre otros despuntaran. A todo ello, contaban con artistas de primera fila como Amparo Baró o Luís Merlo.

Varios años más tarde, en una época en la que los remake y spin off está de moda, en Atresmedia no han perdido el tiempo y lo han hecho llegando a un acuerdo con Amazon Prime Video en el que en la primera promoción ya leíamos: “de las cenizas de ‘El Internado”. La nueva serie, “El Internado: Las Cumbres”, se sitúa en un internado en el que la dura disciplina hará que los jóvenes problemáticos se reinserten en la sociedad. Como no podía ser de otra manera, esta institución se encuentra en medio de un bosque que esconde secretos y misterios que siempre están presentes.

La nueva serie cuenta con Asia Ortega, Albert Salazar, Daniel Arias, Daniela Rubio, Claudia Riera, Paula del Río, Gonzalo Díez, Carlos Alcaide, Sara Balerdi y Francisca Aronsson. Completa el reparto Natalia Dicenta, Ramiro Blas, Alberto Amarilla, Mina El Hammani, Joel Bosqued, Patxi Santamaría, Lucas Velasco entre otros.