‘La boda de Rosa’, la nueva película de Icíar Bollaín, protagonizada por Candela Peña, llega a nuestros cines en un momento complejo. Con la incertidumbre que acompaña a cada estreno en esta etapa tan extraña que estamos viviendo, pero también con la confianza de que el público responderá. Y mostrando un importante apoyo a la industria, que necesita de más estrenos como este para reencontrarse y revitalizarse después de unos meses muy oscuros.

De esto mismo hablamos con la propia Candela Peña, que aseguró estar feliz con el estreno, con Málaga y con lo que venga. “Es una forma de decirle al mundo ‘chicos, cultura segura. Que habéis estado cuatro meses acompañados por nosotros, echadnos un capote’”, señaló durante nuestra conversación, en la que quiso destacar desde un principio la importancia de contar historias como esta. “A mí, las historias me han salvado la vida, por eso me parecen tan importantes”, nos contaba, recordando cómo pasó toda su infancia en el cine cercano a su casa.

Precisamente por ese amor hacia las historias es por lo que encuentra especial ‘La boda de Rosa’. Pese a que reconoce que hay algo de ciencia ficción y de fantasía, sobre todo en la manera en la que ocurre todo, Candela Peña ha encontrado en ella una historia de esas que merece la pena contar. “Ojalá una persona, aunque sea solo una persona, tome las riendas de su vida y toque al botón nuclear por haber visto ‘La boda de Rosa’. Esto es por lo único por lo que me gusta contar historias”, señalaba la actriz.

Con respecto a su personaje, nos comentó que su intención siempre fue la de construir a Sancho Panza. “Esa eterna escudera que está al lado siempre. Y que si este hombre dice que aquello son gigantes, pues peleo con los gigantes. No le digo que son molinos. Me abandono completamente para que la prioridad sean siempre los demás. Espero que no veáis las costuras, pero es de los personajes con más composición que yo he hecho”.

Su mirada viva y su alegría desbordante evidencian que está feliz y orgullosa del trabajo. No sólo a nivel individual, sino colectivo. Y es que la actriz no dejó de repetir, siempre que tuvo la ocasión, lo importante que ha sido tener el apoyo de sus compañeros de reparto. “Si pasara algo bonito con este personaje, es gracias a la familia que tengo. Porque me he colocado mucho en ella”, nos decía, entre sonrisas y emoción. Nada más sentarse con nosotros, Candela Peña nos confesó que siempre había querido trabajar con Sergi López y con Nathalie Poza. Además de con Ramón Barea. Y que se llevó una más que grata sorpresa con Paula Usero. “¡Lo que me ha enseñado, siendo tan chica!”

Mucho más que una boda

Otro de los aspectos que Candela Peña señaló con ahínco durante nuestra conversación fue que siente ‘La boda de Rosa’ como mucho más que ese enlace con uno mismo. Para la actriz, la boda es una manera bonita y mágica de contar todo lo demás, que es lo que realmente encuentra importante. “A mí, lo que me importa de la película no es la boda. Creo que es una película que habla de la soledad, de la precariedad laboral, de las familias invasivas sin querer serlo, de lo difícil que es tomar las riendas de tu vida… Habla de mil cosas. El colofón es la boda, porque es una película, pero me interesa más todo lo demás”.

En sus propias palabras, este es el gran regreso de Icíar Bollaín, una “película para todos” capaz de generar un cambio en los espectadores.