El entretenimiento tiene una función muy importante y es hacernos soñar. Vivir dentro de personajes entrañables, oscuros y ciudades inimaginables. Adentrarnos en aventuras y hacernos partícipes de ello. ¿Y cuando sabes que eso está ocurriendo fehacientemente? Cuando el público que te rodea apenas respira. Cuando el silencio sobrecoge la sala del cine. Así lo pudimos vivir hace unos días al acudir al prestreno que HBO organizó. Si su saga cinematográfica no supo encantar, la serie tiene todas las papeletas para hacerlo. Quizá porque el espacio tiempo nos dará la opción de querer y crecer junto a sus personajes. Porque se han parado a dar cariño a una historia que tiene demasiados recovecos como para resumir en noventas minutos de vida.

Esta adaptación de la saga homónima de Philip Pullman tiene todo lo que un buen espectador de historias épicas necesita. Magia. Amistad. Enemigos majestuosos. Un indescriptible misterio. Silencios. Una banda sonora con gancho. Una protagonista inocente pero avispada. Carácter. Pero, sobre todo, la necesidad del saber. Porque cuando, al final, vayamos a negro, querrás quedarte y ver mucho más. Querrás acompañar a Lyra a Londres. Y ver qué ocurre allí. Ver a una Marisa entregada a esa niña que ya ha ganado tu corazón. Ver cómo se forjan nuevas historias alrededor. Y qué pasa con esas mascotas que alegran cada una de las escenas en las que aparecen.

La serie sigue a Lyra (Dafne Keen), una joven aparentemente normal pero asombrosamente valiente que proviene de otro mundo. La búsqueda de su amigo secuestrado desvela una trama siniestra que implica a niños robados y se convierte en la búsqueda de una explicación que pueda dar respuesta a un misterioso fenómeno llamado Polvo. Lo positivo de la historia, de lo que HBO quiere narrarnos en su nueva serie, es que consigue encandilarte no solo con una parte de la historia, sino con todo el contexto. Claro que me interesa saber qué ocurre en su institución, o que demonios sucede con el Polvo, pero también quiero que me expandan el mundo de cada uno de los integrantes relevantes de la historia. Quiero más. Quiero saber mucho más de ellos. Y que me sorprendan. Quiero que en cada nuevo capítulo haya algo que me deje con la boca abierta.

Si desde el año 2000 los fans de esta Saga de libros no ha vuelto a disfrutar de sus letras, puede que en esta ocasión, olvidando su paso por el cine, encuentren un lugar estupendo para revivir la historia. Es cierto que solo tenemos las sensaciones de un primer capítulo pero su producción ha llegado para quedarse. La Materia Oscura es un nuevo mundo para soñar.

Fotografías La Materia Oscura