Adéntrate en las profundidades el Castillo de Malahide en Dublín y descubre tres historias de fantasmas que te aterrarán.

La primera historia de la que vamos a hablar es sobre Puck, un bufón que trabaja a para la familia de los Talbot, dueños del castillo de Malahide. Cuenta la leyenda que Puck se enamoró locamente de una doncella, una noble mujer que era miembro del séquito que ayudaba a Lady Eleonora Fitzgerald. Era un secreto a voces que el bufón cortejaba a la dama y, de repente, fue encontrado apuñalado en el corazón a las afueras del castillo. Se dice que afirmó antes de morir que su fantasma vagaría por el castillo hasta el fin de los tiempos. Algo extraño debe haber ya que son muchos los que afirman que se sienten presencias indescriptibles cuando visitas en determinadas épocas la fortaleza. 

Ya sabes, si vas a ver este maravilloso castillo medieval del siglo XII sabes que probablemente te encuentres con más de una alma en pena vagando por él. 

La segunda historia la protagoniza una mujer llamada Maud Plunket. Era la hija del varón Kilenn, la cual se casó tres veces, con tres hombres, que terminaron falleciendo algunas horas después del enlace. Después de la tercera boda, Maud no pudo más con el sufrimiento y murió. Es conocida como ‘La novia de Malahide. Cuentan que el fantasma se pasea con traje de novia por los pasillos del castillo de Malahide, llorando por sus tres amados muertos y por un amor que cree nunca llegará. 

La última historia que tiene esta fortaleza es la de un soldado llamado Miles Corbett. Fue ahorcado tras describirse que había realizado alguno de los crímenes más sangrientos conocidos hasta la fecha. Tras ahorcarlos, lo despedazaron y lo enterraron. Pues bien, cuenta la leyenda, que puedes ver a su fantasma vagando por los alrededores del castillo de Malahide haciendo ruido con sus armaduras y cadenas. Esto lo hace aparentemente para llamar la atención ya que cuando alguien se acerca para verlo más de cerca, termina despedazándose y mostrando una imagen horripilante que no se espera ver en un fantasma. 

Después de estás historias, solo nos queda desear que paséis una terrorífica noche de Halloween y que los fantasmas os acompañen.