Don Patricio y su música poseen ese ingrediente secreto capaz de trasladarnos directamente al verano, a una playa paradisiaca, con el sonido de las olas de fondo y un refresco en la mano. El canario, probablemente porque lo lleva en la sangre, sabe cómo hacernos viajar con sus canciones, y eso es precisamente lo que hizo el pasado martes en Zaragoza. Con motivo de las Fiestas del Pilar, el rapero ofreció un completo concierto, en el que interpretó sus canciones más conocidas, pero también hizo un repaso general por su trayectoria musical, incluyendo algunos éxitos de su banda, Locoplaya. 

Como suele ocurrir en los shows de Don Patricio, el buen rollo y la fiesta fueron los protagonistas de la noche. Algo más de una hora de actuación en la que el cantante volvió a meterse a todos los asistentes en el bolsillo, quienes no dudaron a la hora de corear su nombre y de seguir sus juegos. Incluso aquellos que habían acudido al concierto como acompañantes acabaron formando parte del propio espectáculo, como también suele ocurrir siempre que hablamos de este rapero, cuyo carisma parece no tener barreras. 

Esta ‘etapa’ de directos del canario está llegando a su fin. Lleva meses presentando ‘La dura vida del joven rapero’, álbum con el que ha alcanzado definitivamente el éxito, pero la batería no se le agota. Este martes, en el escenario de Espacio Zity, se volvieron a apreciar la misma ilusión y las mismas ganas en un artista que aprovecha todas las ocasiones que tiene para mostrar su música y demostrar su talento. 

Mucho baile y una invitada de lujo

Siempre que he tenido la suerte de disfrutar de Don Patricio en directo ha ocurrido lo mismo: lo que comienza como un concierto termina siendo además una fiesta. Y en Zaragoza volvió a pasar lo mismo. El canario, que empezó fuerte con ‘Me gusta’, no tardó en prender al público. En menos de lo que dura una canción, la mayoría de los asistentes ya estaban saltando, bailando y tratando de seguir el ritmo de sus complicadas letras, siempre entre risas. Porque eso nunca falta en sus shows, en los que no entra el aburrimiento. 

Las canciones pasaron demasiado rápido entre sonrisas, bailes y pelotas de playa que terminaron de encender a los espectadores, para los que el rapero tenía preparada una gran sorpresa. Ya en los últimos compases del concierto, cuando llegó el turno de ‘Lola Bunny’, su tema junto a Lola Indigo, anunció la llegada de una invitada especial. Mimi Doblas apareció entonces en el escenario, cargada de energía y dándolo absolutamente todo entre baile, canto y performance. La unión de estos dos funciona en el estudio, pero sobre todo funciona en el directo, algo que pudimos volver a comprobar. 

Esta actuación sorpresa fue, sin duda alguna, uno de los mejores momentos de la noche, en el que el público enloqueció por completo, disfrutando de ese aperitivo del propio concierto de Lola Indigo, que tendrá lugar el sábado 12 de octubre. 

Espectáculo con mayúsculas

Precisamente en este tema, ‘Lola Bunny’, escuchamos a Don Patricio afirmar que no canta bien, pero le sobra el auto-tune. Personalmente, creo que se infravalora en esta afirmación, pero ese es otro debate. En lo que si acierta el canario es en asegurar que le sobra el auto-tune, así como todos los ‘complementos’ que pudiera añadir a sus actuaciones. Y es que, después de un par de conciertos suyos, he llegado a la conclusión de que él mismo es espectáculo. 

No necesita nada más que sus canciones, sus rimas y su carisma para construir un show completo, participativo y que gusta al público, que lo atrae y no lo suelta hasta que ha terminado. Un show en el que la energía está siempre en el máximo nivel y en el que la música es tan protagonista como el buen rollo. Tanto es así que, por momentos, logra que nos olvidemos de todo lo que hay alrededor y viajemos verdaderamente a esa playa que tanto le gusta.