La de Juan Maidagán y Pepón Montero fue una idea loquísima. Llevarnos al año 31 a.C. y presentarnos a Manio Sempronio, un patricio desastroso, vago y algo inútil que acaba de matar accidentalmente a un senador y debe suicidarse. Abrazando el humor de lo absurdo, estos dos creadores han reescrito una parte de la historia de Roma, a la que han representado en personajes como el propio Manio, el esclavo Agorastocles o el general Cneo Valerio. La primera temporada de la ficción, estrenada el pasado año 2019, fue bien recibida por el público al que iba dirigida, ese que disfruta del humor más amable y más inofensivo y que está más que preparado para retomar las aventuras de patricios, soldados, eunucos y esclavos. 

Este viernes 13 de marzo, Movistar+ estrena la segunda y última temporada de ‘Justo antes de Cristo’, que contará de nuevo con seis capítulos de media hora de duración, en los que este humor de lo absurdo seguirá siendo protagonista. Aunque habrá cambios: esta nueva entrega es más profunda, en ella tiene más peso la trama principal y se da una vuelta de tuerca a algunos personajes, como es el caso de Valeria. De ello hablamos hace unos días con Julián López, actor que da vida al propio Manio Sempronio y que se ha declarado fan absoluto de la serie. 

En referencia a esta segunda temporada, que ha podido ver antes de su estreno, el intérprete y cómico asegura que se trata de “una temporada trepidante, y eso que dejamos el listón muy alto. Está repleta de grandes momentos, comicidad, más tragicomedia… Veremos cómo existe una mayor profundidad en los personajes y cómo hay tramas que ya se apuntaban en la temporada anterior y que ahora se desarrollan mucho más”.

Precisamente esta profundidad es uno de los aspectos más destacables de una segunda entrega en la que la trama principal tiene mucho más peso. En contraposición a la primera, la cual era más capitular, aquí “hay algo que late todo el rato, también en las relaciones entre los diferentes personajes”, como nos señaló el propio Julián López, que también quiso destacar el papel de los personajes femeninos. “Además, emergen los personajes femeninos, es una temporada más hacia arriba. Un guiño a lo que está pasando en estos últimos tiempos”.

Otro de los aspectos que destacan si hablamos de ‘Justo antes de Cristo’ es ese humor de lo absurdo que no ofende y que es amable, pero no por ello poco afilado. Para Julián López, la clave de que este humor esté tan conseguido en la ficción está en “escribir bien” y en tener un guión tan bien construido como el que tiene la serie, el cual ejerce de red para el actor. “Es un humor que no agrede al espectador. Tienes que tener cierto background como espectador para pillar algunas cosas. Y eso es muy bonito”. En referencia a esto, el actor también quiso destacar que el humor que se hace en la serie “va más allá de la simple comedia, aunque esto también sea totalmente válido; es un humor muy inteligente y muy bien escrito”.

En sus palabras, queda patente la admiración que siente hacia el trabajo de los creadores y guionistas y el cariño que le tiene a la serie y a su personaje. De hecho, tal y como confesó durante nuestra conversación -y en sus propias palabras-, “si no formara parte de ‘Justo antes de Cristo’, alucinaría con la serie”. 

Como seguidor confeso de la ficción, es evidente que desearía que no terminara en esta segunda temporada: “sería feliz haciéndola toda mi vida”. Pero, por ahora y con la esperanza de que en algún momento se abra la posibilidad de recuperar esta particular visión de la historia de Roma, se conforma con imaginar el futuro de Manio Sempronio: “me le imagino junto a Agorastocles, viviendo más aventuras”.