Claudia Salas fue una de las grandes sorpresas del pasado año. Sus papeles de Escalante en ‘La Peste’ y Rebeka en ‘Élite’, dos polos opuestos, la han introducido de lleno en el panorama audiovisual español, al que ha conquistado con su autenticidad y con su sensibilidad. Esta joven actriz, que ha sido reconocida con una nominación a Mejor Actriz Revelación en los Premios de la Unión de Actores y Actrices, es ya considerada como una de las principales promesas de su generación y apunta a convertirse en uno de los rostros más populares del futuro de nuestro audiovisual. 

Durante la ceremonia de entrega de los ya mencionados premios, pudimos hablar con ella acerca del esperado estreno de la tercera temporada de ‘Élite’, que llega a Netflix este mismo viernes 13 de marzo. La serie promete volver a situarse como lo más visto del mes no sólo en nuestro país, sino también a nivel internacional. Y es que ya desde su primera entrega, el boom fue prácticamente incomparable y sólo superado por fenómenos como el de ‘La Casa de Papel’. 

Tal y como hemos visto y hemos deducido por las declaraciones de parte de su reparto, la tercera temporada de ‘Élite’ supondrá un punto y aparte en la historia, especialmente porque el elenco cambiará de cara a su cuarta entrega. Esto significa que tendremos que despedirnos de la divertida y auténtica Rebeka de Claudia Salas, un personaje que revolucionó por completo la serie con su arrasadora llegada en la segunda temporada.

“Rebeka es muy bonita por dentro, aunque sea más cañera. Ha sido muy guay jugar con ella, porque es un personaje muy divertido, con ella me lo he pasado genial”, nos comentaba Claudia Salas en la alfombra roja, donde también nos confesó que, en el caso de que Escalante y Rebeka se encontraran en el mismo punto geográfico, no sabría muy bien cómo acabaría la cosa o, en sus propias palabras, quién mataría a quién. 

Con respecto al estreno de la tercera temporada, la actriz nos confesó que está “súper emocionada, sobre todo por la acogida del público”. Aunque asegura que es bastante ajena a todas las redes sociales, está pendiente de cómo reciben los espectadores esta tercera temporada, en la que también se cierra una etapa para ella como actriz, al despedirse de un personaje que ha sido tan especial y tan importante a nivel personal y profesional. 

“Estoy muy contenta porque para Rebeka me han dado la posibilidad de quitarme capas, de romper caparazones… Ella llega un momento en el que hace click y entiende que tiene que entenderse primero a ella misma para poder entender al resto. Entonces de repente se ha dado cuenta de que intenta evadir sus problemas, digamos, solucionando la vida del resto de los que están a su alrededor, cuando realmente es ella la que tiene que importar y la que tiene que ser prioridad para ella. Entonces eso hace click, madura de la noche a la mañana muchísimo y se muestra tal y como es”, nos explicaba acerca de la evolución de su personaje y de lo que veremos en los próximos capítulos. 

Pese a que, como era de esperar, no pudo contarnos nada concreto, sí nos adelantó que veremos a “una Rebeka súper linda, súper tierna, súper frágil, súper vulnerable, muy de verdad y muy transparente y muy bonita”. Parece que, de una vez por todas, va a quitarse ese enorme escudo con el que llegó a Las Encinas y, sin perder en ningún momento su esencia, va a ser más ella que nunca.