Narrar toda tu vida en un libro es complicado pero no imposible. Marina Jade es la autora de ‘Mi ruido azul’, una obra muy emotiva e intensa publicada por Plan B. En ella repasa la separación de sus padres, su infancia, el acoso escolar y LGTBfobia que vivió y su vida actual. En MEW Magazine hemos podido hablar con ella para que nos cuente el proceso de creación y poner en orden todas esas emociones a lo largo de la obra.

MEW Magazine: ¿Cómo te llegó este proyecto? ¿Qué fue lo que te hizo aceptarlo?

Marina Jade: Me escribieron desde la editorial. Fue de sopetón, me lo había planteado alguna vez, pero dije: “venga, sí, dale una oportunidad”

MW: Contar toda tu vida en un libro así es complicado, ¿Cómo fue ese momento en el que dices, vale tengo esto, qué quiero decir realmente?

Marina Jade: Me dije: “tengo que ser completamente yo, pero sin contar demasiado”, porque también me puede perjudicar a mí.

MW: Leyéndolo te das cuenta de que te has quitado una carga emocional importante ¿Ha sido una especie de terapia para ti?

Marina Jade: La verdad es que sí, porque también he hecho mucho trabajo de ver cómo he sido y de cómo soy. Ha habido muchos momentos en los que me he dicho “jope, aquí en este momento he sido mucho más fuerte de lo que yo pensaba.

MW: ¿Cómo definirías ‘Mi ruido azul’?

Marina Jade: Es un caos que tiene sentido y que ojalá ayude a ciertas personas a que no piensen que están solas.

MW: Tratas el tema del acoso escolar y la pérdida de confianza en uno mismo de una manera bastante dura pero realista…

Marina Jade: Es muy realista y refleja lo que vivimos muchas personas. Pero tampoco lo hice con esa intención, Quería que hiciera reflexionar.

MW: En ‘Mi ruido azul’ nos dejas conocerte mejor, esa parte desconocida de esa Marina que se presentó a un concurso de televisión… ¿Ha sido muy difícil hacerlo?

Marina Jade: Ha sido difícil en el sentido de que yo tengo que decir esto y que puede llegar a mucha gente. Tenía que ir con cuidado porque se podían dar a conocer mis debilidades. A la vez me decía: “tengo que ser real sin dar demasiado”.

MW: Leyendo el libro uno se da cuenta de esos elementos de nuestro entorno que son nuestro “refugio”, en tu caso es la música. ¿Qué te aporta? ¿Crees que todo el mundo puede tener el suyo?

Marina Jade: Creo que todo el mundo tenemos eso que nos hace sentirnos bien y ser nosotros mismos al 100 por 100. Ya sea una persona o un hobby, todo el mundo podemos llegar a eso y para mí sin duda es la música. Realmente no soy más yo que cuando escucho música, compongo, canto o toco algún instrumento, es entrar en una burbuja y solo hay paz.

MW: Hay un momento en el que tu vida cambió radicalmente y que en el libro es imposible no emocionarse contigo y es en el casting de OT. ¿Cómo recuerdas ese momento? Para una persona tan autoexigente que alguien reconozca que sirve para eso tiene que suponer un subidón trepidante

Marina Jade: La verdad es que sí. Ten en cuenta que mi autoestima ha ido creciendo en este tiempo, pero que en ese momento no era tan alta. Yo siempre me infravaloro más de lo que debería y me repetía “¿Qué hago yo aquí? No voy a conseguir nada nunca” y que de repente Noemí me pone la pegatina y me dije “si le he podido gustar a ella, que se dedica a saber encontrar el talento, eso significará algo”. Lo recuerdo siempre, fue algo muy bonito porque me di cuenta de que sí valgo para eso.  Es muy bonito.

Creo que todo el mundo tenemos eso que nos hace sentirnos bien

MW: En ‘Mi ruido azul’ comentas constantemente la importancia de tener una salud mental sana. Vivimos en una sociedad en la que ir al psicólogo parece que esté mal visto…

Marina Jade: Me pone muy triste eso. No le damos la suficiente valía y estamos constantemente infravalorando nuestra salud mental que es lo que hace que todo nuestro cuerpo funcione. Si de algo de lo que tienes que ser tan fuerte, yo me pongo lapidas encima por tener que ir al psicólogo y  me hago esa idea, es algo muy feo. No debería ser así.

MW: Una de las cosas más originales del libro se encuentra en la playlist de cada capítulo, dándole un punto de epicidad, ¿Cómo nace esta iniciativa?

Marina Jade: Yo pensaba que me gustaría que hubiera algo de música, pero es un libro. Estaba escribiendo y tenía mi playlist puesta. Un día me dije: “y si hago una playlist para que el lector pueda escuchar todas las canciones con las que yo escribí cada capítulo?”. A mí me parecía muy guay y lo propuse a la editorial, algo que le gustó mucho. 

MW: Uno de los saltos al vacío fue presentarse a OT, algo que recuerdas con mucha emoción, pero ¿cómo se prepara una de pasar al anonimato a darse a conocer?

Marina Jade: No sé cómo lo hicimos (risas). Tu entras en un sitio donde te conocen tu padre, tu madre, tu hermana y tus amigas y de pronto sales y la gente te para por la calle. Te acostumbras con el tiempo pero no lo asimilas. No puedo dar un consejo porque a veces ni me lo creo.

MW: ¿Qué diferencias hay entre componer canciones y escribir un libro? ¿Qué has aprendido aquí que puedes extrapolarlo al mundo de la música?

Marina Jade: Me ha enseñado a tener más paciencia conmigo misma. Lo sabía de escribir canciones, pero no me lo había llevado más a rajatabla.

MW: Por último, ¿te gustaría escribir otro libro distinto? ¿De qué trataría?

Marina Jade: Me encantaría y me gustaría que fuese sobre los relatos que escribo de cada canción que compongo.