Makkila es un restaurante en Madrid que aúna la tradición y la creatividad en todos sus platos. Surge de la pasión por la gastronomía, simbolizando una cierta forma de vivir, de pensar y de homenajear. El grupo Makkila nace de un modelo de pinchos y raciones de manera informal, con un aire muy fresco y juvenil. Ha ido evolucionando hasta convertirse en un local de referencia situado en algunos de los lugares más emblemáticos de la capital.
Actualmente, la carta de Makkila experimenta y fusiona todo lo que se les ocurre. Se definen a sí mismos como una casa de comidas “fusión cañí” en la que poder compartir la cocina española y disfrutar con tus amigos o familiares. Los locales son acogedores e ideales para todo tipo de encuentros y reuniones.
Makkila se distingue de otros restaurantes por sus diferentes ubicaciones en Madrid. Su oferta gastronómica, que mantiene su esencia española inicial, pero apostando por la innovación y la combinación con otras culturas culinarias. El equipo del grupo Makkila cada vez es más internacional, y también lo son sus clientes. Ha sabido adaptarse a la demanda para ofrecer una carta rica, variada y versátil con imaginación y creatividad.
En la carta encontramos entrantes imprescindibles como la clásica tortilla de patata poco cuajada con cebolla caramelizada que se deshace con el primer bocado. Su mítica ensaladilla rusa o unos huevos rotos con jamón ibérico, grana padano y aceite de trufa. Podemos encontrar platos de toda la vida y otros como bao de mollejas de cordero con setas.
En Makkila Italia está representada con un popular y delicioso plato: la burrata de puglia con crema de pistachos. O si no, algo más de aquí, la ensalada de tomate ibérico, ventresca y piparras. Podrás continuar con algún plato de pasta o lasaña. El pescado en diferentes formas y variedades: tatakis, jarrete, hamburguesa o un cachopo de ternera. Influencia peruana con un tiradito de corvina, asiática con el tartar de atún y española con el pulpo a la brasa.
Makkila es un restaurante desenfadado, de comida rápida y sencilla pero muy cuidada y de buen sabor. Para picar y compartir ricos platos. Sin duda, todo un acierto.
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