TVE nos presentó ayer el estreno de Olmos y Robles, una supuesta comedia ambientada en un thriller policíaco en el que une a un Sargento de las Unidades Especiales y un Guardia Civil de un pequeño pueblo de La Rioja, donde en el transcurso de la serie parece que dicha provincia tiene más tráfico que la M30 de Madrid en pleno viernes.

Los 5 primeros minutos ya apuntaba manera que iba a ser una serie… un tanto… ¿lenta? Vamos a decirlo así. Se nos ¿prometió? una serie cómica, pero roza lo absurdo, aburrido y  repetitivo. Sin nada nuevo que ofrecer mas que una burda imitación de la versión más mala de Mortadelo y Filemón, nunca mejor dicho, añadiendo la picaresca de hacernos ver que “más vale maña que fuerza” y poder casi mirar por encima del hombro a esos que dicen poder hacerlo todo por tener más rango, menos la suficiente cabeza para reconocer que un cabo sin recursos tecnológicos había resuelto el caso de una forma más humilde y campechana.

El exceso de minutos en pantalla de Pepe Viyuela (Sebastián Olmos) junto a un escaso, y bastante mal interpretado, personaje de Rubén Cortada (Agustín Robles) nos hicieron pegar cabezazos en seguida. Dejando el punto humorístico a la que ya nos tiene acostumbrado Ana Morgade (Catalina), un alcalde interpretado por Álex O’Dogherty (Damián Navarrocomo) que hace referencia a la viva imagen de lo que muchas localidades españolas tienen, junto a los pueblerinos más mayores que siempre dan ese punto de desparpajo.

Si bien los vecinos dan esa vidilla de cotillas y todos reunidos por saber qué ocurre, el momento de “procedo a soltar nalgas” nos sacó una buena carcajada inexistente casi durante el resto del capítulo.

Momentos en los que parecía que Luisma (Aida) iba a parecer en cualquier instante, y momentos en los que Paco Miranda (Los hombres de Paco) saldría con su trupe entre matorrales o puentes.

Sin mucho más que ofrecer que el caso de un asesino en serie que tiene como peculiaridad cortarle la cabeza a sus víctimas a lo Sleepy Hollow, un Guardia Civil con unas teorías locas y otro Guardia Civil de tipo duro/chulo que, a pesar de todo, no es tan duro ni tan chulo y acepta las teorías de su compañero asignado por narices. ¿Habéis visto la serie estadounidense Castle? ¿O leído los tebeos de Ibáñez? Lo dejo en el aire.

El público español echa de menos series de familia al más puro estilo ‘Ana y los 7’, ‘Médico de familia’ o ‘Los Serrano’. No series que a los cinco minutos cojas un mando de TV para cambiar a una película que repiten 200 veces en otro canal.

Esta misma serie enfocada desde un punto diferente podría haber echo eco de otra forma no tan negativa. Si bien el caso te dejaba con algo de ganas de saber más, del motivo del porqué elegía al azar a las víctimas, el porqué le cortaba la cabeza y las piezas de un puzzle que podrían haber dado mucho más juego… la elección de ‘sketches’ mal elaborados y quizá, inclusive, una mala elección de reparto han hecho que caiga empicada.

Creo que los directores/productores españoles tienen un mejor producto que esto. Así lo demuestran en sus películas, aunque esto será otro tema a tratar en otro momento.

Por acabar una crítica un tanto estrepitosa, los televidentes que aguantaron del tirón el capítulo de anoche fueron unos auténticos héroes. No se si de lo macabro o de lo crítico. Desde luego, esperar que ‘Olmos y Robles’ sea una serie de éxito es ser muy ambicioso.

Fdo. #Reviewnator