Ya nos tiene acostumbrados a soñar. Sus directos muestran un estilo diferente. En muchas partes, apabullante. Con un sonido propio y diferenciador. Rizha llega a sonar a épico. De esas canciones que pocos ofrecen pero con las que se forja una identidad.
En las dos horas de directo pudimos volver a disfrutar de cada uno de los éxitos que está lanzando al mercado. En un ambiente cálido e íntimo. Orquestado todo por el coro en el que ha convertido a su público. Un público fiel que la acompaña en cada nueva aventura. Algo que resulta tan alucinante a día de hoy. Porque sus asistentes cuentan con una edad donde la adolescencia desequilibra el universo. Y choca ver que aplaudan un proyecto como el de Rizha cuando nos rompen todos los sentidos con música comercial. Hay esperanza y eso motiva.
Rizha desborda categoría sobre el escenario. Se pasea como si fuese su casa. Absolutamente. Divide los actos que ofrecerá cada noche de forma espectacular y consigue tener a su público saltando y entusiasmado.
Es de esas artistas que sabes que no debes perder la pista. Que aún le queda un trecho por recorrer y que, tarde o temprano, el gran público la descubrirá. Será en ese momento cuando podamos decir que ya existía. Que nadie la ha descubierto. Que se ha forjado el carácter y la música. Que tiene un sello propio y único. Que vive por el arte y que lo transmite.
Rizha comienza su Tour mundial de su nuevo album ‘Outside‘. Y es pura locura.
Comments