El mundo del cine es una de esas industrias que han marcado la pauta en una sociedad en contante cambio. Una de las películas más importantes de los últimos 30 años es ‘Instinto Básico’. La película estrenada en 1992 y dirigida por Paul Verhoeven fue protagonizada por Sharon Stone y Michael Douglas. El próximo 20 de diciembre se estrena en TCM el documental ‘Desmontando Instintos’, un trabajo audiovisual dirigido por Jacinto Carvalho.

En este documental han participado los protagonistas,  Sharon Stone y Michael Douglas, el guionista Joe Eszterhas y el director Paul Verhoeven. En él, nos muestran todos los detalles de una de las películas históricas e icónicas de la industria del cine. Grabado entre Estados Unidos y Europa, ‘Desmontando Instintos’ nos acerca un mundo interior muy peculiar.

Desde el planteamiento inicial de la película se nos muestra que no fue un camino fácil para nadie. La idea de que la mujer sea la protagonista y villana no terminaba de convencer al director y a Michael Douglas. Pese a eso, el guionista tenía claro desde el inicio que era una película rompedora de todas las normas no escritas del cine. Y lo hacen con un personaje principal potente.

Inicialmente la película tuvo un largo proceso de producción y en ese periodo estaba las reticencias sobre la protagonista. Sharon Stone no entraba dentro de un modelo de este tipo de películas. Sin embargo, tras mucho batallar conseguía entrar en una película que le acabaría cambiando la vida, eso sí para bien y para mal.

La verdad tras la cámara

Que Sharon Stone era una mujer poderosa y versátil no es nada nuevo. La artista lo confirmó en un momento en el que nadie confiaba en ella. Las dudas sobre sus capacidades estaban presentes desde el primer momento en el equipo de rodaje, pero era de las pocas actrices que estaba dispuesta a mostrarse desnuda ante las cámaras. La timidez se transformó en una mujer rompedora y que rompía con todo en un mundo donde le estaban juzgando con lupa.

En un mundo donde en el que los hombres son los centros de interés, Sharon Stone logró hacerse con su hueco. Sin embargo, tuvo que pagar el duro precio de la fama. Por una parte, le hicieron creer que en la mítica escena del interrogatorio no se veía nada, pasando la mayor vergüenza posible en el cine. A todo ello, ‘Instinto Básico’ también le provocó perder todo lo que ella más quería.

En líneas generales, ‘Desmontando Instintos’ nos encontramos con un documental que aporta poco. Bien es cierto que está bien trabajado y que ha sabido aportar una visión distinta. Originalmente molestó a ciertos colectivos, pero permitió abrir una ventana a un mundo que parecía avanzado y seguía estancado.