Carol Rovira tiene ‘Almas Viejas’ en sus manos. Y en unas horas, estará en las nuestras. Caminando por nuestros sentidos. Un tema que evoca a recuerdos. A ese pasado que ha gestado algo en nuestro interior. Esos momentos que dejan poso y futuro. A historia de amor. Sueños escondidos. A deseos furtivos. A invisibilidad forzada. Y Carol lo cuenta y lo narra con absoluta delicadeza. Como quien mira. Como quien observa. Desde la ternura. Desde ese abrazo sincero.

Qué bonito que una guitarra vieja nos traiga un tema así. Qué bonito que un encargo a medida haya provocado todo esto.

‘Almas Viejas’ llega en un momento especial para Carol Rovira. En un momento en el que ha decidido darse ese permiso para disfrutar de la música desde otra dimensión. Más pública. Más de compartir. Para refugiarse en composiciones. En crear. Y en mostrar. Dejando miedos a un lado. Y disfrutando. Porque de eso trata la vida. De hacer lo que se quiere y sin presiones de por medio.

Hay pocos lugares donde se puede experimentar tanto como en la música. Un lugar donde la búsqueda de sonidos es infinita. Y si tienes un buen gusto musical solo puede sumar y sumar. Carol Rovira tiene todo un camino por delante. Desde la tranquilidad y el sentido. Y esperamos poder recorrerlo junto a ella. Porque la música es mucho más de la que nos venden. Es más de artistas de raíz. De tierra.