· FICHA ·
Título: La chica del sombrero azul vive enfrente
Autora: Ana María Draghia
Editorial: Harlequin Ibérica
Fecha de publicación: 2018
En este libro encontrarás: romance juvenil, viajes personales de auto-descubrimiento, un bonito pueblo inglés
Sinopsis: Carlota tiene veinte años, un secreto y un billete de avión para Castle Combe. Está decidida: va a ser una persona nueva y va a olvidar a la chica del sombrero azul. Por ello, cuando llega a la granja de Helen Robinson, comienza a ignorar todos los problemas que se han quedado en Barcelona. Sin embargo, con su caótica estancia en el pueblo inglés y la insufrible presencia de Clark, el nieto de Helen, saldrán a relucir los temores olvidados y un fantasma que aún sigue muy vivo. El viaje de su vida traerá consigo el recuerdo de su hermana Candela y la necesidad de reencontrarse con ella, pero también la ternura y la incertidumbre de haberse enamorado de alguien que puede desaparecer. Así, con escala en Barcelona-Castle Combe-Camprodon, Carlota abrirá la puerta de una habitación que lleva vacía mucho tiempo: la del perdón. Pero ¿encontrará la manera de no volver a cerrarla cuando descubra que no es la única que tiene algo que esconder?

Lo que más me gusta de Ana María Draghia es lo que ella misma me contaba en la entrevista que tuve oportunidad de hacer: la realidad que busca y concede a sus escritos. Es una de esas escritoras que siempre voy a querer leer porque además de poseer una sensibilidad fantástica y mucho ojo para las buenas historias, sé que sus libros siempre me van a transportar de manera precisa y convincente al escenario propuesto. Al margen de la trama o los personajes que la protagonicen, sé que esto estará siempre conseguido porque (después de hablar con ella, también sé) es algo en lo que siempre va a esforzarse. Quizá os parezca que incido demasiado en ello, pero crear algo real, escribir algo real, me parece complicado y fundamental para lograr que un libro te atrape. Si no me lo creo, lo dejo. Y las historias de Ana María Draghia siempre me las creo.

‘La chica del sombrero azul vive enfrente’ es una de mis favoritas. A veces cuesta hablar de algo que te ha gustado tanto, que te ha hecho sentir tanto, precisamente porque los sentimientos son ese algo que flota no sabes cómo dentro de ti. Y flotan muchas cosas en torno a este libro que puede leerse en dos días y que te llenará de amor, de fortaleza, de valentía y de comprensión.

<< Mi vuelo llevaba un retraso de siete horas cuando, por primera vez, tuve miedo de dejar mi ciudad y habitual caos. El aeropuerto me pareció pequeño y atestado de gente que apuraba los últimos minutos de sus vacaciones; personas que, al contrario que yo, volvían a su hogar. Yo me iba, lo abandonaba por tres razones fundamentales: porque era joven y un tanto inconsciente, porque no hacía más que discutir con mi familia y porque un pequeño y destartalado cajón de mi mente guardaba la esperanza de hallar lo perdido en algún lugar lejano >>

La protagonista de nuestra historia es Carlota, una joven que ha sufrido una gran pérdida que durante mucho tiempo le hizo entregarse al dolor, sin concesiones para el futuro que queda por delante. Pero, tras años en las sombras, decide al fin que quiere recuperarse, por eso decide marcharse un verano a Castle Combe, acogiéndose al programa de au-pair que permite a las personas alojarse con una familia a la que debe cuidar. Con muchas dudas, muchos miedos y muchas inseguridades, Carlota, pasito a pasito, se va redescubriendo a sí misma y conociendo a otras personas que pueden ayudarle en su búsqueda. Esta clase de libros me tienen ganada, porque ficcionalizan un mantra que llevo por bandera: que la cura puede estar donde menos te lo esperas, y que sobre todo está dentro de ti misma. Y que luchar por ella, ganártela y abrazarla es una experiencia de vida.

<< Después llegó el silencio, en el que ya no hubo ni música ni cuentos. Ni un juntas ni un conmigo ni ganas de leer nada, porque ella se había leído, a mi parecer, todos los libros. Pero entonces, ese verano en Castle Combe, comencé a recuperarla sin darme cuenta. La reviví con la intensidad de quien no se ha ido nunca. Fue como si regresara. No había habido paréntesis. Hablar de ella en ese presente devastador me insuflaba un ápice de fe >>

Las virtudes y los defectos de Carlota están bien plasmados, porque la construcción es la adecuada. Lo pensé cuando me di cuenta de que estaba comprendiendo sus sentimientos a pesar de encontrarme a años luz de ellos; eso solo puede decirse cuando un personaje está bien escrito. Con ella, los personajes secundarios: Helen, Clark, Ginnie y todos los habitantes de Castle Combe, y todos los que Carlota deja atrás. Los conocemos en un espacio reducido, porque solo es un libro, pero los conocemos bien. Sus actos tienen sentido y su personalidad siempre está reflejada.

<< Ginnie me cogió de la mano. Ni siquiera recordaba que estuviera a mi lado. Me hizo la pregunta sin hacérmela y yo se la contesté sin decirle nada. Los ojos de un niño son intensos. Te atraviesan y encuentran bajo los escombros lo innombrable. Ante ella me sentía expuesta por completo. Nunca me había gustado sentirme desposeída de recuerdos y sentimientos, sin embargo, en ese instante acepté la aprehensión de sus manos alrededor de las mías. Supongo que sabía que tenía miedo, aunque no fuera consciente de cuál era el motivo que me hacía temblar >>

Retomo la importancia de lo real en la ficción para destacar los diálogos. Son divertidos, originales, sin clichés y, sí, reales. Como lo es la propia historia, como lo son los personajes y las relaciones que se desarrollan entre ellos. En literatura quizá esté todo escrito en cuestión de planteamiento, pero cuando una pluma es auténtica y honesta ese más de lo mismo queda reinventado. Eso pasa en ‘La chica del sombrero azul vive enfrente’. Los puntos de los que parte no son novedosos, pero su desarrollo es fantástico y es de verdad. Y como lo que importa en literatura es, sobre todo, el camino, no tanto el principio ni tampoco el final, este libro es un gran libro.

Y es duro, porque aborda temas complicados que pueden tocar todo tipo de sensibilidades, pero están abordados desde el respeto, el conocimiento y eso mismo: la sensibilidad. ‘La chica del sombrero azul vive enfrente’ es perfecto para los amantes de lo juvenil, del romance y de personajes que necesitan encontrarse. Y para quien quiera disfrutar de algo bien escrito, porque Ana María Draghia escribe muy bien.

<< Eres especial, Carlota. Cuando estás cerca, me acuerdo de respirar, sin importar si hay o no ventanas. Quizá porque tú eres mi ventana >>