Ricardo Ruipérez conocido por ser componente de la banda M Clan, ha decidido embarcarse en una carrera en solitario. Así fue cuando hace unos meses lanzaba su álbum ‘En la distancia corta’ y el pasado mes de febrero su último single ‘El discurso’.  Ahora como bien dice el cantante, se encuentra en otra etapa más y también diferente, pero que aún así sigue aprendiendo. Además ha adelantado que se vienen muchos temas nuevos, en los que irá variando un poco. 

“Para mí las canciones nunca están acabadas”

MW: Antes que nada, queríamos saber de ti, ¿cómo estás? ¿Cómo estás pasando el confinamiento?

RUIPÉREZ: Bien. Estoy en casa haciendo las tareas domésticas y luego trabajando en el estudio. Yo tengo la suerte de tener un estudio aquí en casa, entonces componiendo mucho. Justo ahora estábamos colgando en las redes, ‘Calle sin luz’ en acústica. Es un poco también mi rutina. Realmente yo trabajo mucho en casa, o sea que no me viene muy mal.

MW: Bueno un pasatiempo ahora mismo son las redes sociales y por lo visto estás muy activo en las tuyas aportando tu música, ¿cuánto de importante crees que es la música en nuestro día a día? ¿Y para ti?

RUIPÉREZ: La música es muy importante, mucho más de lo que la gente piensa. Porque todo bicho viviente necesita música en algún momento, una canción, una melodía… Forma parte de nuestra razón de ser. En mi caso es tan importante como que es mi profesión, mi forma de vida y lo que desee hace mucho tiempo para bien o para mal.

MW: Relacionado con ello has participado en el festival #YoMeQuedoEnCasa y bueno también subes vídeos tuyos cantando, dime  ¿cómo es para ti terminar una canción y no recibir ese feedback por parte de tu público?

RUIPÉREZ: Es una sensación un poco extraña porque tú estás tocando, y luego ves la respuesta que has tenido. Es una sensación diferente. Yo llevo muchos años subiéndome a un escenario, pero el tocar aquí en casa con mucha gente detrás del móvil es una sensación rara. La verdad es que no me suelo acostumbrar mucho. Porque tú das toda la energía y todo lo emocional y de repente termina. Pareces un loco que está solo tocándole a la pared.

…”si salía algo en solitario mío tenía que ser personal y autentico, no inventarme un personaje y algo que no soy”

MW: Ha pasado tiempo desde que la banda M Clan os disteis un descanso, y hace relativamente poco empezaste una carrera en solitario y sacaste ‘En la distancia corta’, ¿cómo fue este cambio para ti?

RUIPÉREZ: Bueno dijimos que con M Clan íbamos a parar unos años porque llevábamos diez o doce años seguidos sin parar disco-gira, disco-gira. Y aprovechamos para sacar un poco nuestra vertiente personal. La verdad que muy contento, es otra etapa más, otra etapa diferente y aprendiendo, que creo que es de lo que se trata.

MW: Bueno he leído por ahí que tuviste cierto reparo con tu voz y el escucharte previamente al lanzamiento del disco ¿a qué se debe esto?

RUIPÉREZ: Normalmente cuando preguntes al 95% de los cantantes te dirán que no les gusta escucharse a ninguno, incluso los mejores. Al no haber cantado nunca me costó encontrar el tono, mi voz… Y poco a poco aquí aprendiendo, todavía me queda un camino, pero sigo aprendiendo.

MW: ¿Podría decirse que expones tu faceta más personal?

RUIPÉREZ: Sí. Yo creo que si salía algo en solitario mío tenía que ser personal y autentico, no inventarme un personaje y algo que no soy. Son letras muy personales.

MW: ¿Con qué canción te quedas del álbum y por qué?

RUIPÉREZ: Bueno, siempre digo lo mismo de esto. Para mi todas las canciones tienen un significado muy importante y depende del estado de ánimo pues te gusta escuchar una u otra y cantar una o cantar otra. En mi caso te puedo decir ‘Ahora que dudo’, es una canción que me siento muy identificado de es esa etapa o la que les hice a mis hijas ‘Ángel Dorado’ o ‘Daniela’.

MW: Bueno hace poco sacaste tu último single ‘El discurso’, ¿qué mensaje quieres transmitir con esta canción?

RUIPÉREZ: ‘El discurso’ es un canto a la desesperanza un poco del mundo actual. Es otra formación que ha habido en los discursos actuales y los discursos de hace cuarenta años. Se ha ido perdiendo. Es un poco un canto a la desesperanza, es una canción un poco maldita, en el sentido de que tiene ese poso. A mí me atrae el amargo sabor de la derrota y es una sensación muy bonita para escribir. De ahí un poco esa terminología, pero sí que me inspira bastante ese punto de sueños perdidos e inalcanzados en esa esperanza.

MW: Has adelantado que se vienen nuevos temas, ¿podrías darnos algún adelanto?

RUIPÉREZ: Lo que tengo son unos treinta temas, y ahora me has pillado transformando uno que se me quedó un poco lento y quise cambiar media letra y que fuera un poco más rápido, un poco más rock. Tengo temas un poco más duros, un poco más cañeros y un poco más ácidos también y poco a poco voy aprendiendo y dando rienda suelta a mi creatividad sin complejos, es decir, que no le pongo freno tampoco.

MW: ¿Te sientes inspirado ahora con tanto tiempo libre o te cuesta más concentrarte?

RUIPÉREZ: Yo creo que cuando estás en modo de componer, cazas las ideas más rápido. A mí me pasa un poco así tengo las canciones en mente, las melodías, letras, frases… Y sigo ahí. Cuando paras de componer, un poco te olvidas y te entra el vértigo y ves que no vas a ser capaz de componer una canción. Pero luego de pronto sale y las ideas van viniendo.

MW: ¿Y tú tienes alguna rutina para componer?

RUIPÉREZ: Tengo muchas. Desde una frase, una letra, un poema, un riff, una guitarra, una base rítmica… a partir de ahí empiezo. Pero trabajo mucho la canción, yo no hago una canción del tirón y ya vale, voy cambiando el formato, transformando…  Para mí las canciones nunca están acabadas

MW: Una persona como tú que tiene mucha experiencia y bagaje musical, ¿qué consejo le daría a una persona que está comenzando su carrera?

RUIPÉREZ: Para mí lo más importante es que haga sus composiciones, que haga sus canciones. Que empiece a componer en castellano si es su idioma, y en turco si es turco, pero que componga en su idioma. Que trabaje sin prejuicios, sin complejos, sin pensar en lo que pensarán de él o de ella. Y verá que cuando tenga diez canciones, nueve serán malísimas. Cuando tenga cincuenta, habrán diez geniales. Componer es un proceso de aprendizaje todo el rato, un no parar.