Hay series que pasan más desapercibidas. Y no sé muy bien el motivo. La mayoría de las veces pienso que es que no tocaba. Que no era su momento. O que el público aún no estaba preparado para ello. En ‘The Bold Type’ tenemos una redacción de una revista como eje de todo. Donde sus tres protagonistas trabajan y casi viven. Donde descubren que las redes sociales son un arma de doble filo, que el amor en el trabajo puede limitar tus aspiraciones o que tener alguna que otra barrera personal, puede echar el freno de mano de sopetón.
Nos hablan desde la verdad de su día a día. Desde la vorágine de una redacción que ve recortadas ciertas perspectivas. Donde entendemos y comprendemos que la imagen es una cosa y la realidad otra. Donde una portada te puede vender el oro y el interior un contenido inapropiado.
En ‘The Bold Type’ hablan del trabajo y de las relaciones personales. Mezclan el glamour de una redacción con Jane, Kat y Sutton. Tres chicas que lo quieren todo. Que sueñan con todo. Pero, que, poco a poco, van descubriendo que, ese todo, no es tan asequible o tan rápido de obtener. Encuentran en el mundo un puñado de injusticias a las que tendrán que enfrentarse. A voces que gritan y dedos que señalan. Y verán el amor pasar por sus narices. A ratos se subirán y, en otros momentos, saldrán en dirección contraria. Porque, ‘The Bold Type’, también habla de los miedos. De los nuestros.
Vemos como lo personal y lo profesional te ponen en tesituras difíciles de afrontar. Somos testigos que llegar a la madurez es mucho más complicado de lo que nos habían insinuado.

Jacqueline, una lección diaria
Jacqueline es quien dirige todo. Quien controla los contenidos en la revista. E, incluso tu alma. Aunque con un espacio de margen increíble. Donde deja que te equivoques, que caigas y que vuelvas a levantarte. Es ese ángel de la guarda que, a ratos, también hace de demonio. Y te busca y te reta. Queriendo obtener lo mejor de ti.
Jacqueline es una mujer independiente, valiente, capaz de defender a quién sea si el motivo así lo requiere. Sin pelos en la lengua y que siempre va de frente.
Comments